El amor es un acto de libertad
El amor es un acto de libertad
Estamos acostumbrados a pensar que el amor es una sentimiento pero es más complicado que todo eso. Más que un sentimiento lo vamos a definir como un ejercicio de la libertad, como una elección. Es una opción por la cual eliges libremente compartir tu vida con alguien. Nadie te obliga. Es un acto de libertad.
Si el amor no es por tener “suerte” de encontrar a la persona adecuada. ¿Podemos hacer algo nosotros para enamorarnos o para elegir mejor nuestra pareja? ¿Podemos hacer algo para desarrollar nuestra capacidad de enamoramiento?
Nuestra capacidad de amar a nuestra pareja no es algo que nos venga dado sino que la podemos cuidar o no y sí que podemos desarrollar más o menos nuestra capacidad de amar a una pareja. La sociedad de hoy no nos ayuda a cuidar nuestra capacidad de amar o de enamorarnos. ¿Cómo podemos desarrollar esta capacidad?
3 condiciones para el amor maduro en una relación de pareja
1. Haberse desprendido de la Familia de Origen
Para que me pueda enamorar de alguien, tengo que desenamorarme de mi familia (de mi padre o de mi madre), porque ha habido una época (infantil) done yo he idealizado a los padres, pero eso ya forma parte de mi historia. Si pienso en las natillas de mi madre que son mejores que las que me hace mi novia… pues no me puedo enamorar porque mientras esté enganchado de las faldas de mi madre no puedo soltar.
Porque el afecto de una madre suele ser un afecto incondicional que nunca me falla y nunca me pide nada a cambio. La novia/o real no es así, su afecto no lo tengo bajo todas condiciones, no lo tengo cuando y como yo lo quiero, sino que es una conquista, una seducción para ser elegido por ella/él.
Debo pues, hacer un cambio en mi afectividad. Elegir entre amor incondicional que me viene dado, que NO he elegido libremente (el de mi madre o padre) por un amor condicional que he elegido libremente y al que tendré que conseguir, conquistar y cuidar con la garantía de que me quiere libremente porque me ha elegido a su vez, entre muchos otros.
¿Cuál de ellos es el más gratificante? ¿El que me viene regalado o el que supone una conquista?
Me tengo que desprender de ese amor de mamá/papá, renunciar al amor incondicional, al amor como y cuando yo quiero para poder permitirme la libre elección y/o ser así mismo, libremente elegido. Esto es una evolución personal. Un paso fundamental en el desarrollo humano para la identidad propia, elija tener pareja o no.
2. Necesito tener una identidad propia bien definida
Para que mi relación sea un acto de libertad, tengo que ser capaz de estar y saber estar solo conmigo. Porque si yo estoy contigo por miedo a estar solo/a, ya no es una libre elección, sino que será entonces “porque no me queda más remedio”.
Es un problema pensar que soledad es igual a abandono, a algo así como “que nadie te quiere” y desde ese insano pensamiento, hay grandes dificultades entonces para poder estar bien con uno mismo. Hay una frase que dice: “el que no sabe estar solo es que no se cae bien”
No pensamos que estar solo/a se está bien y que sólo desde ahí es de donde se puede elegir libremente, no elegir por miedo a la soledad. Socialmente no se promueve que hay una soledad sana y necesaria para nuestro desarrollo y crecimiento en autonomía.
Esto ocurre con las personas que tienen parejas cambiantes lo hacen por no estar solos, porque no se puede dar un espacio propio para estar consigo mismo… pero si no sé estar solo/a… no podré amarte, de forma madura y responsable con todo lo que ello implica.
Tener pareja no quita libertad sino que la da. Decir “no puedo vivir sin ti” no es demostración de amor sino de dependencia, porque no es libre la elección cuando hay necesidad, no amor. Decir “puedo vivir sin ti perfectamente pero prefiero estar contigo”, esto puede que no quede romántico, pero demuestra amor maduro.
3. Existencia de Proyecto
Entender que “Tú no eres el sentido de mi vida sino un medio no un fin” (esta sociedad nos acostumbra a lo contrario, en los finales de las películas que se casan y se les supone ya por ello felices. Un fin).
Si te elijo libremente desde mi ser autónomo es para compartir algo. Eso significa que tengo algo que compartir. Así una relación de pareja no resuelve nuestra vida y si pensamos que la va a resolver y que con eso ya será una vida completa estamos apañados y así pasan tantas decepciones.
Yo con mi pareja me tengo que poner de acuerdo y crear un proyecto común, proyecto de crear, transformar, aportar algo a este mundo. Al compartirlo me enriquezco y hay pareja porque hay proyecto. Y porque he elegido libremente construir algo con esa persona. Pero ella no se convierte en el sentido de mi vida, sino que mi sentido de vida es compartido con ella, con la elegida libremente por mi.