El Crush: diferentes máscaras del amor fantasma e imposible, ¿Tu fantasía inalcanzable o tu pareja ideal?
El Crush: diferentes máscaras del amor fantasma e imposible, ¿Tu fantasía inalcanzable o tu pareja ideal?
Como construcción social, el amor tiene muchas interpretaciones que se construyen y se deconstruyen a lo largo del devenir histórico del hombre. Podemos darnos cuenta, que las cosas que vivieron nuestros antepasados nos siguen influyendo en el amor en nuestros días. Por ende, existen muchos tipos de amor, asociados a los hijos, la familia, la humanidad, a los animales y por supuesto a la pareja. Y, todas ellas están conectadas con nuestros antepasados.
El amor descrito por Platón en su obra el “Banquete” nada tiene que ver con la forma como se utiliza el concepto de “amor platónico” hoy en día. La filosofía de Platón giraba en torno a: lo bello, lo verdadero y lo justo, todos ellos imbricados. Esto representaba, el camino a la verdad y un amor sin lazos sexuales.
Se han utilizado como sinónimos de amor platónico; amor y enamoramiento idealizado, pero no son lo mismo. Mientras el amor es mutuo y bidireccional. El enamoramiento es unidireccional. Otras acepciones que se le da actualmente al amor platónico, es amor a primera vista, atracción, amor secreto y muchas más.
El anglicismo “Crush o crush” es un concepto polisémico y hace referencia actualmente al amor y al enamoramiento, e incluso al amor platónico. Puntualmente, la palabra se traduce como “estar enamorado de alguien o tener algo con alguien”.
El amor platónico o tener un crush con alguien, es un punto ciego en las relaciones de pareja. Y da como resultado tener parejas disparejas, porque el amor ideal, no existe. Si, este tipo de amor es la base para formar una relación real o potencial, lo más probable, es que sea muy efímera o evanescente.
¿Por qué se dice que el amor es una construcción social?
Solemos pensar que el amor es una emoción universal y que siempre ha existido como lo conocemos actualmente, pero no es así. Cada cultura y cada persona tiene una cosmovisión de él.
El concepto del amor como construcción social, ha venido cambiando a lo largo del tiempo y de la historia, y sigue cambiando en la actualidad. Debido a la complejidad de encerrar el amor en una definición única, la cual no existe, se describen una serie de elementos globales que han venido nutriendo la palabra “amor”. Diferentes tipos de amor presentes a lo largo de la historia, confluyen hoy día en la palabra crush, aplicado al amor.
En la prehistoria no existía concepto de amor, era más bien una diversidad sexual la que practicaba el hombre de esos días, la cual persiste en la actualidad.
Para los egipcios y los romanos el amor se asociaba a casarse para tener hijos y que esos hijos formaban parte del ejército. El amor, estaba regulado por el Estado. Tener descendencia es importante para la supervivencia como especie y muchas personas en la actualidad, lo priorizan como un requisito de proyecto de vida, dicen: “Yo quiero casarme y tener hijos”. En la antigüedad, era común la práctica del incesto, la endogamia y la poligamia, para conservar el poder en las clases dominantes.
En la edad media, el amor estaba mediado por la Iglesia, entonces, era: “amaras a Dios, sobre todas las cosas”. También era regulado por los intereses políticos, sobre todo en las clases altas, el amor era más bien un trato comercial. Se consideraba que, estar enamorado, era una enfermedad del alma. Se le conocía como “amor heroico, loco y poseído”, porque los amantes eran poseídos por fuerzas sobrenaturales. Actualmente, se distingue fácilmente una persona enamorada, se piensa que incluso algunos se vuelven adictos a experimentar los cambios internos que produce estar enamorados, entonces no era raro que el enamorado medieval, también se le considerara enfermo, loco o poseído. Hoy seguimos estando “locos de amor”.
La edad media, fue el inicio del amor romántico. Posteriormente, en la época del Romanticismo, se retoma el concepto de matrimonio y se mezcla con el amor apasionado para toda la vida. El amor y el sexo son uno mismo. Hay quienes creen que el sexo es el pilar más importante en el matrimonio, pero esto tampoco es así.
Durante la época del Romanticismo, partían de la idea que: se amaba a una persona, por decisión y por conveniencia. El matrimonio, aquí, tiene nuevas reglas socioculturales, que forman parte de la ideología de la época.
Llama la atención que, en la época Victoriana las propuestas de amor matrimonio, se hacían por escrito. Y, no se podía ver a la pareja potencial sin la presencia de un acompañante, pues resultaba inapropiado mostrar interés carnal el compañero o compañera, era muy mal visto. También era una época en donde la doble moral aplicaba a diferentes aspectos de la vida cotidiana, como sigue sucediendo en la actualidad.
Al principio del siglo anterior, no se podía hablar de emociones y sentimientos, mucho menos de erotismo, esos eran asuntos personales y privados. Posteriormente, en los años sesenta, se rompe con el “estatus quo” de la monogamia y se practica un amor libre, democrático y desvinculado de la procreación.
En la actualidad el amor es líquido y confluente: el primero; vinculado a la diversidad sexual y a la falta de compromiso, el segundo; resulta un amor activo y libre de limitaciones.
Hoy día, difícilmente podemos desligar las ideas que vivieron nuestros antepasados en el terreno del amor, pues tenemos todavía un poco de todo: en ocasiones reprimimos nuestros deseos carnales, otras más los dejamos libres, los asociamos con tener una pareja e hijos, casarnos o no, tenemos mayor libertad sexual y en ocasiones una doble moral. Sin embargo, los efectos que siente una persona enamorada o que ama a alguien siguen siendo procesados por un cerebro similar que lleva años de evolución.
¿Por qué el amor tiene tantas interpretaciones?
Existen tantas definiciones del amor como personas hay en este planeta. Al momento de realizar el presente escrito y consultando el sitio especializado worldodometer (2024) se estima que hay 8 mil millones de personas en el mundo, en este momento. Lo cual significa que podríamos tener esa misma cifra de definiciones del amor, una por cada habitante.
Detrás de las diferentes definiciones del amor, subyacen relacionadas: emociones, actitudes, sentimientos y muchos actos orientados, al amor. Y, todos ellos dirigidos al disfrute y bienestar de: los padres, los amigos, los hijos, la humanidad o una pareja.
Se mencionan, solo con propósitos descriptivos, diferentes tipos de amor, derivados de la efervescencia amorosa, histórica del hombre: amor por uno mismo, amor locura o heroico, amor enfermedad, amor erótico, amor compañía, amor romántico, amor a Dios, amor fraternal, amor incondicional, amor pragmático, amor lúdico y muchos más. Bueno, entonces podemos fácilmente intuir que estos tipos de amor, no salieron de la nada y cada uno esta imbricado con los demás. Y, cada persona tendrá una interpretación singular de ellos.
¿El amor platónico, es el mismo que planteaba Platón?
Un apartado independiente de la historia en este caso, es el amor Platónico. Para los griegos el amor se asociaba a: la tragedia, el robo, los celos, la posesión, la muerte y la traición. El concepto de amor estaba asociado en lo individual a un desequilibrio, perder el equilibrio era enfermar y sufrir alteraciones de personalidad. En lo colectivo, era una lucha desencarnada entre los dioses.
Hace 2400 años aparece el concepto de amor platónico. Para el filósofo griego Platón, el amor descrito en su obra “El Banquete; era un amor idealizado y sin relación sexual. Se trata de la concepción filosófica de un amor sin lazos sexuales ni románticos” (Clarín, 2024).
La filosofía de Platón giraba en torno a tres elementos: lo bello, lo verdadero y lo justo (Garduño, Flores & Fernández, 2013, p.72). Estas tres cualidades estaban relacionas y no se podían separar. Y, el amor platónico consistía “en que la persona que ama no va a amar la belleza simple; se va a concentrar en buscar lo bello de quien ama” (Universidad de la Sabana, 2019). Y, desde ese punto, el amor sí era alcanzable. En el amor platónico original, “no hay un comportamiento o deseo sexual manifiesto”. (APA, 2010, P. 24). Es un amor del camino a la verdad.
Sin embargo, la interpretación actual del amor platónico o amor imposible es: un amor no correspondido, idealizado, perfecto y un enamoramiento unidireccional. Y con muchísimas connotaciones más.
Es el amor que se experimenta por una persona cuando está enamorada de alguien en particular. No es el amor original en la versión de Platón, es un enamoramiento unidireccional, y se conoce también como amor fantasma e imposible, es tener un crush. “Se produce cuando idealizamos a la otra persona, atribuyéndole características en su físico y personalidad que desearíamos en una pareja. Es una forma de autoengaño porque realmente nos enamoramos de algo que no existe, de ahí el nombre de fantasma”. (El Litoral, 2022).
¿Cómo llegamos a esta distorsión del amor?
Algunos tecnicismos en ocasiones a lo largo del tiempo se vuelven de uso común, perdiendo el significado original como psicoanalizar o el amor platónico. Actualmente el concepto del “amor platónico”, nada tiene que ver con la visión original del filósofo de Atenas. El amor platónico se ha vulgarizado. Tendemos a simplificar la realidad y esa es una característica de los seres humanos, entonces formamos grandes categorías cognoscitivas y las sintetizamos en conceptos simples.
En la polisemia del amor platónico, hoy se le asocia también: con estar interesados en una persona y fijarnos en lo físicamente bello, sentirnos atraídos sexualmente, idealizar a alguien, desear a alguien que no se tiene, no ser correspondido, depositar en la persona nuestros vacíos y necesidades psicológicas. Tener una percepción asimétrica de la realidad es una distorsión cognitiva y punto ciego en la relación de pareja, el amor platónico, se convierte en un amor inalcanzable; en lo intelectual, lo social, lo económico y muchos otros elementos más. Es amor pasional, erótico, idealizado, compañía, romántico, sociable, vacío, consumado, encaprichamiento, cariño y más. El amor platónico es el amor cuando se tiene un crush, también se sigue construyendo y deconstruyendo. Este tipo de amor, está presente en la vida virtual y presencial de las personas.
Sin embargo, esto no es nada nuevo, es una combinación de muchos tipos de amor que hemos vivido en épocas anteriores. Es una fuente de felicidad e ideal, es el vellocino de oro, de la mitología griega o instrumento mágico dotado de poderosas habilidades curativas y protectoras. Es omnipresencia en el tiempo y el espacio: “El amor lo cura o lo puede todo”.
No estamos encontrando el hilo negro, ni inventando el agua caliente.
Como decía la filósofa Delia Steinberg Guzmán: “Buscamos lo que no tenemos, ya que si lo tuviésemos no habría que buscarlo. Y, el ser humano ama, lo que le falta, y porque le falta lo ama. Como se siente incompleto, tiende hacia aquello que considera importante, para sentirse plenamente humano en su totalidad”. (Nueva Acrópolis España, 2023).
Sentirnos incompletos nos lleva a la búsqueda, y en el camino nos enfrentamos a nuestros propios vacíos existenciales, a la trampa de encontrar fuera de nosotros la felicidad, a la búsqueda de los ideales de belleza y a suponer que vamos a encontrar lo complementario, la media naranja, el alma gemela y todo lo que nos hace falta para vivir una vida plena.
¿Qué hay detrás del concepto Crush?
El concepto de crush, es un anglicismo o palabra que se usan generalmente los jóvenes, que en inglés significa: «machacar», «aplastar», «triturar» o «exprimir», pero que lo traducen como «estar enamorado de …». Luego entonces, las diferentes máscaras de este concepto, se relación con: amor a primera vista porque alguien nos gustó, estar enamorado de alguien en general, tener un amor secreto que nunca nos hará caso, un amor idealizado, una media naranja, un alma gemela, una atracción a primera vista. Es encontrar en una persona, lo que nos hace falta y por eso le amamos.
Enamorarse de alguien que nos atraiga, no tiene nada de malo, pero suponer que alguien va a llenar nuestras necesidades psicológicas, supone que no estamos completos y que necesitamos a alguien haga ese trabajo por nosotros.
Etiología de la forma como se forma un Crush
Existen algunos elementos a tomar en cuenta, en el proceso de elección consciente o inconsciente para “enamorase de una persona o tener un crush. Veamos algunos de ellos:
- La teoría de la atracción como gratificación, supone que “nos agradan aquellas personas cuya conducta nos resulta gratificante, o las personas vinculadas con acontecimientos gratificantes para nosotros”. (Myers, 1991, p. 450). En palabras sencillas nos sentimos atraídos por las personas cuya presencia nos resulta gratificante y satisfactoria.
- Por otro lado, la teoría del intercambio social, supone que si en una relación son más altas las recompensas que los costos, vamos a permanecer. Sin embargo, en ocasiones, no tenemos ninguna recompensa, en el amor platónico, solo las expectativas que podríamos estar con una persona gratificante y esperamos que la recompensa llegue en algún momento. La motivación de permanecer ahí, es que tendremos una gratificación postergada cuando estemos con la persona amada. El cerebro no distingue en ocasiones lo que tenemos y lo que imaginamos que tendremos. La expectativa de la felicidad genera felicidad, dice la neurociencia. Baste recordar los experimentos que la antropóloga Helen Fisher hizo sobre las personas enamoradas, metiéndolas a un resonador magnético: en el cerebro se prendían los centros de recompensa. Bueno, pues con tan solo pensar en la persona amada, se activan los centros de recompensa.
- Vivir con una persona atractiva suponemos que es tener una vida bonita y atractiva. Ello cumple con el estereotipo del atractivo físico: “Es la creencia de que los individuos físicamente atractivos poseen rasgos de personalidad socialmente deseables y llevan vidas más felices que las de las personas menos atractivas”. (Franzoi, 2007, p. 412). Mucho influye la primera impresión que nos causa una persona y ello nos puede hacer sentir atracción sexual.
- Idealizar a una persona: Cuando idealizamos a una persona, la vemos perfecta: exageramos sus características positivas, y excluimos e ignoramos los aspectos negativos. La idealización: Es un proceso psíquico en virtud del cual se llevan a la perfección las cualidades y el valor del objeto. (Laplanche & Pontalis, 1993, p. 182). Somos más vulnerables a idealizar a una persona, cuando: nos sentimos solos, con baja autoestima, o bajo autoconcepto. Creemos que bajo la protección de ese ser divino, del cual estamos enamoradas o enamorados, será capaz de cubrir todas nuestras necesidades: eróticas, socioafectivas, emocionales, psicológicas, económicas y espirituales.
- Sentirse solo. No es lo mismo estar solo que sentirse solo. Podemos ser solteros y sentirnos solos, pero también podemos tener incluso una pareja y experimentar; soledad en compañía. Cuando nos sentimos solos, experimentamos sentimientos de ausencia, abandono y una vida sin relaciones personales o sociales satisfactorias, estamos más vulnerables a enamorarnos. Cualquier persona podría ser una excelente tabla de salvación en el amor, en esas condiciones.
La persona que busca un crush, aunque esté rodeada de otras personas, en lo más interno, puede sentirse vacía, aun teniendo pareja.
Seguimos en la búsqueda de nuestra alma gemela, de nuestra media naranja y depositamos nuestra soledad en este tipo de amor, no cristalizado e idealizado. Es peligroso: ¡Sentirse solo o incompleto! o ¡Sentir soledad en compañía!
Revisemos el deseo para explicar esta situación. El deseo funciona de manera relativamente simple, aunque es muy complicado. “Deseamos aquello que no tenemos. Y, no queremos perder, lo que ya tenemos”.
La figura del amor imposible sintetiza esta realidad: buscamos en esa persona nuestro Crush, lo que no tenemos y amamos de esa persona, lo que nos falta.
Luego entonces, no tenemos felicidad y carecemos de amor. Es una paradoja, dime de lo que hablas y te diré de lo qué careces. Es uno de los puntos ciegos que hacen a las parejas disparejas.
Existen algunos países, que conscientes de los terribles efectos que produce la soledad (tristeza, ausencia, abandono, depresión, aislamiento y suicidio), han creado Ministerios de soledad para atacar esta condición; destacan entre ellos Japón y Reino Unido. “Esto se debe a que este fenómeno social afecta a la población y repercute en casos graves como la depresión o el suicidio”. (La República, 2022).
¿Quién puede ser tu Crush?
Cuando se trata de un crush, esta persona puede ser alguien cercano, lejano, una figura virtual o incluso una figura pública.
- Si consideramos que esas personas son bellas, en algún aspecto de la vida, no necesariamente por su apariencia física, suponemos que detrás de esa apariencia hay también una vida bella.
- También creemos que necesitamos relacionarnos con un modelo a seguir. Buscamos a las personas que admiramos. Y, queremos que nos quieran, como suponemos que alguien nos podría querer. Si consideramos a alguien exitoso en algún área de la vida, nos gustaría estar con esa persona.
- Buscamos seguridad emocional. Si nos sentimos perdidos o creemos que alguien es más estable que nosotros mismos, se vuelve una luz al final del camino que quisiéramos seguir. Si, hemos perdido la brújula emocional y conocemos a alguien que la tiene, suponemos que podríamos tirarnos al vacío y esa persona sabría orientarnos y guiarnos como lo hace con su propia vida.
- Depositamos nuestros propios deseos, aspiraciones y expectativas en esa persona. Aquellos proyectos que aún no los hemos realizado, sí alguien más ya los llevó a cabo o pasó por grandes penurias o desventajas, y suponemos que tiene mayor capacidad de crecer en la adversidad, confiamos con los ojos cerrados que nos podría guiar también.
- Nos agrada alguien que puede ayudarnos con nuestras necesidades humanas como son: afecto, seguridad, reconocimiento, amor, expresión de sentimientos, autoconcepto, autoestima, solidaridad, apoyo emocional, compañía, protección, alimentación, confianza, motivación, respeto, armonía, bienestar, escucha, conexión, certidumbre, amistad, intimidad sexual, compasión, altruismo, sentir ilusión por la vida, descanso y muchas más.
Categorías de personas que aman o están enamoradas y tienen un Crush
En las tipologías, podemos distinguir al menos tres:
- Amor o enamoramiento secreto: Cuando se tiene una pareja y se está enamorado de otra persona fuera de la relación, se trata de una infidelidad afectiva sin contacto sexual. Es un amor sin lazos eróticos reales.
- Amor o enamoramiento potencialmente posible. Cuando no se tiene pareja y se está enamorado de una persona alcanzable y posible, simplemente se trata de un enamoramiento que puede pasar a una relación potencial. Es atracción pura.
- Amor o enamoramiento florentino imposible: En honor al escritor, poeta y político italiano Dante Alighieri, autor de la divina comedia. Estuvo enamorado de su vecina Beatriz, a la cual conoció a los 9 años. Fue su musa. Cuando crecieron, ella se casó con otro hombre. De hecho, Dante nunca le habló. Sin embargo, fue su amor: ideal y secreto. Fue, su amor fantasma, e imposible. También fue su crush de aquella época, su pareja ideal y su fantasía inalcanzable, es el pináculo del amor platónico de la actualidad. Es un amor o enamoramiento con atracción, pero sin lazos eróticos reales.
Perfil de alguien que tiene un Crush
Mi estrategia es que un día cualquiera, no sé cómo ni sé con qué pretexto, por fin me necesites. Mario Benedetti
- Sentirse incompleto en su vida afectiva y creer que alguien más puede completarle, en sus: emociones, afectos, área sexual, intelectual, social y cubrir algunas de sus necesidades como ser humano.
- Sentir atracción por alguna persona y creer que puede ser su alma gemela, su media naranja o el amor de su vida.
- Percibirse con cierto grado de soledad. No importa, sí se encuentra soltero o pasando una etapa de soledad en compañía.
- Tener la posibilidad de elegir una pareja potencial, desde sus carencias afectivas. Mientras más idealizada se tenga a una persona, más expectativas de felicidad creará a nivel de recibir una gratificación. Ello hace que pueda experimentar emociones positivas de forma anticipada, aunque la relación de pareja nunca se dé.
- Sentir atracción por una persona y sentirse enamorado, experimentando todas las reacciones fisiológicas de ese estado placentero. El enamoramiento es: la acción de excitar en alguien la pasión del amor. Es empezar a sentir amor por otra persona. También se utiliza como sentir entusiasmo por una cosa o deseo de ella. (Punset, Bisquerra & Laymuns, 2018, p.81) Pensar en la persona que nos atrae, sentir motivación sube la norepinefrina, tener pensamientos obsesivos con un amante se refleja a nivel cerebral con bajos niveles de serotonina. Y, experimentar placer y adicción por la persona de la cual se siente enamorada, eleva siete mil unidades la dopamina, conocida como la hormona del placer.
Reflexión final
Se escucha romántico cuando una persona dice que tiene un crush. Sin embargo, en el abanico de las categorías propuestas en este recorrido, puede entenderse como una atracción o un enamoramiento, que nos predispone positivamente a amar a alguien. Es también una relación secreta que oculta una infidelidad afectiva sin contacto sexual. Y, también una relación idealizada que muchas veces será imposible.
El riesgo de quien decide tener un amor platónico o un crush, es suponer que a esa persona le depositaremos nuestras expectativas de felicidad y ello resultará en una relación tóxica, en donde el crush elegido cargará con la responsabilidad de hacernos felices.
En la polisemia del amor, un Crush, tiene diferentes máscaras. Es un amor platónico, un amor fantasma e imposible, una fantasía inalcanzable y un amor de pareja idealizado. Sin embargo, todo ello en la realidad, NO existe.