Lo bueno y lo malo de ser amigovios

En síntesis

• Las relaciones de amigovios, amigos con roce o amigos con derechos, son una alternativa en la expresión de la sexualidad, en la cultura e ideología de la modernidad líquida, caracterizada entre otras cosas, por el fin del compromiso mutuo y las relaciones interpersonales fugaces.
• Es más común en adolescentes, adultos jóvenes o emergentes (adultos de 18 a 30 años). Y, adultos maduros, fundamentalmente sin hijos.
• En su definición conceptual, se puede entender como las relaciones sexuales entre dos personas que mantienen un lazo de amistad, sin que esté, de por medio una relación romántica inicial.
• Pueden estar mediadas más por la amistad o más por las experiencias sexuales. Y, ello traerá consecuencias buenas o malas, basadas en el proceso de su origen, desarrollo y fin de la relación.
• Desde el punto de vista de la Psicología Social, es una relación de inclusión del otro en el yo. Esa inclusión, puede ser: solo sexual, solo de amistad, o ambas y dar inicio a una relación de amor romántico.
• Si bien los ejes que estructuran este tipo de relaciones son la amistad y las relaciones sexuales, en el contexto también están imbricadas por: la atracción sexual, la proximidad, la homofilia o personas con características sociales similares, la angustia psicológica, la necesidad de pertenencia, sentirse sol@, o incluso el consumo de drogas.
• Si la relación de amigovios termina, muy probablemente es que en lo cualitativo era más sexo que amistad. Propiciando la separación de los amigos y en algunos casos, sin conexión sexual y social posterior al rompimiento.
• Sin embargo, si la relación de amigovios continúa, se fortalecerán los lazos sexuales y de amistad. Y, puede dar lugar a una relación de amor romántico.

Explorando la amistad

Una de las cualidades más bonitas de la amistad verdadera es comprender y ser comprendido. Séneca

Todo mi patrimonio son mis amigos. Emily Dickinson

Durante el proceso de socialización se van formando lazos de amistad con los otros. Se forman lazos emocionales con la familia y con los amigos. Las relaciones basadas en la amistad son fundamentalmente voluntarias y en general se espera que sean satisfactorias.

De acuerdo al diccionario de la APA (2010), se entiende por amistad: “la relación voluntaria entre dos o más personas que es relativamente duradera y en la cual los involucrados tienden a mostrar interés en satisfacer las necesidades de los otros, así como sus propios deseos. (APA, 2010, P. 23). Es importante destacar de la presente definición, la temporalidad relativamente duradera y la satisfacción de las necesidades.

Si exploramos la forma como nos relacionamos a través de la amistad, el caldo de cultivo en el cual se gesta es muy variado y complejo, solo por citar unos cuantos elementos se destacan: el apego y cohesión social, se considera a la amistad, como la más fundamental de todas las relaciones humanas, en los amigos encontramos similitud (de edad cronológica, de estatus socioeconómico, de psicopatologías o salud mental, de características físicas -peso, estatura-, de intereses, de compartir secretos o códigos de autorrevelación, de compartir comportamientos morales e inmorales, de comportamientos funcionales o disfuncionales, de compartir afectos), de divergencia de pensamientos, cercanía o propincuidad (del barrio, la escuela, el club, la iglesia, ambiente social, etcétera), de inclusión o exclusión de comportamientos libidinales, la amistad son necesidades de pertenencia y de asociación, es simbiosis psicológica (es una sociedad cooperativa entre dos individuos que produce equilibrios y desequilibrios entre los amigos). Al menos este último aspecto, nos revela que las amistades no son un mundo ideal y no son perfectas, pero si deseables.

En la amistad, el individuo busca satisfacer inconscientemente sus necesidades. Nos agradan las personas que nos brindan: afecto, pertenencia, nos ayuden a aumentar nuestra autoestima, que nos permitan expresarnos como somos, nos den confianza, nos proporciones ayuda, solidaridad, seguridad o protección, nos permitan ser escuchados y en algunos casos sexo.

Dos aspectos más de la amistad a considerar son: la complementación simbiótica y la expansión del yo.

• La complementación simbiótica, es una paradoja, pues se busca en la amistad con la otra persona, no lo que ya se tiene, sino aquello de lo que se carece. Por ejemplo, cuando un amigo en la dupla es introvertido y el otro extrovertido. Así, cada una de las personalidades, se expande dentro de la otra.
• En la Psicología Social, se analiza la amistad, a través de la expansión del yo. Buscamos “la inclusión del otro en el yo” (Franzoi, 2007, p. 444), esto es, expandimos nuestra personalidad cuando vamos incorporando rasgos, conductas sentimientos, emociones, actitudes del otro a nuestra persona. No, es convertirnos en el otro, sino expandir nuestra personalidad con las cualidades buenas o malas de la otra persona, sin perder la propia esencia.

La diversidad de las relaciones en el ejercicio de la sexualidad

Un amigo es alguien que te da total libertad para ser tú mismo. Jim Morrison.

El sexo con amor es la cosa más grandiosa de la vida. Pero, el sexo sin amor, tampoco están tan mal. Mae West, actriz estadounidense.

La sexualidad humana ha estado presente a lo largo de la historia de la humanidad, y de la vida de los seres humanos. Abarca: las identidades, el sexo, los roles de género, el erotismo, la orientación sexual, la reproducción, la intimidad y el placer.

De acuerdo al Glosario de la diversidad sexual, de género y características sexuales (2016), “La sexualidad humana, se vive y expresa en pensamientos, fantasías, deseos, creencias, actitudes, valores, comportamientos, prácticas y roles, así como en relaciones interpersonales”, está influida e imbricada con factores: biopsicosociales, económicos, políticos, culturales, legales, ideológicos, religiosos, históricos y espirituales.

Por otro lado, el concepto de las relaciones sexuales, están orientadas al contacto físico de dar o recibir placer, ya sea con fines reproductivos o no. Pueden incluir diversidad de contactos, tales como: coito, besos, caricias, sexo oral, y una infinidad de parafilias, es decir, conductas o fantasías sexuales de tipo excitatorio. Es la expresión de nuestra sexualidad.

Y, justo en la conjunción de ambos conceptos amistad y relaciones sexuales, se ubican los amigovios.

Una relación romántica se define como interacciones mutuas, continuas y voluntarias entre dos parejas que se caracterizan por expresiones específicas de afecto e intimidad (Collins, et al., 2009). La cuál coincide con las ideas contemporáneas sobre las relaciones románticas.

Cuando el ser humano tiene posibilidades reales de ser independiente, la sociedad ya no es aquella suma de individualidades sino el conjunto de las mismas. Para Bauman, la modernidad líquida es como si la posibilidad de una modernidad fructífera y verdadera se nos escapara de entre las manos como agua entre los dedos. (Hernández, 2016). Se caracteriza por varios acontecimientos: la identidad personal se fragmenta, existe una inestabilidad laboral, una cantidad ingente de información que nos satura todos los días, una falta de credibilidad de algunos modelos educativos, pero, sobre todo, se presenta el no compromiso mutuo y las relaciones interpersonales fugaces dan forma a la sociedad liquida. Este último punto, describe a la perfección el tipo de relaciones de pareja en el modelo de los amigos con beneficios o amigovios. Uno de los elementos que funciona como imán entre los amigos, es la tensión sexual que se genera, si se considera que el amig@ es atractivo, o se presentan condiciones para cruzar esa línea.

Las relaciones de amigovios, han pasado por el proceso de la amistad y el acuerdo es disfrutar del hedonismo de la gratificación inmediata, con cierta flexibilidad sexual, pero desvinculados emocionalmente de lo sexual. Se alcanza una gratificación postergada, en las relaciones de mayor compromiso y vinculación erótica y emocional en las relaciones románticas.

El amor ha tenido una larga historia y en el contexto actual de las relaciones románticas existen múltiples interpretaciones, sin embargo, una de las más reconocidas en la de la teoría triangular del amor del psicólogo Robert Sternberg, compuesta por:

• Pasión: Excitación, atracción física, necesidad de estar con la pareja y deseo de tener relaciones íntimas.
• Intimidad: Cercanía, conexión, confianza, amistad y afecto, y
• Compromiso: Decisión de continuar la relación a pesar de los altibajos.

En el contexto de los amigovios, el amor romántico, cumple con la pasión y la intimidad, pero no con el compromiso a largo plazo de construir una historia, es solo la gratificación inmediata.

¿Existe un compromiso sin compromiso?

Sin embargo, por paradójico que resulta, sí existe un compromiso. El compromiso es no decir o comunicar a otros el tipo de relación que se tiene, porque se trata de una relación de infidelidad, relativamente frecuente y por supuesto es secreta. Sobre todo, cuando alguno de los involucrados, tiene una relación oficial.

La experta en este tema, es la psicoterapeuta Esther Perel. Sostiene que la infidelidad incluye uno o más de los siguientes tres elementos: Secretismo, alquimia sexual e involucramiento emocional. (Perel, 2023, p. 41).

• Secretismo: Quién vive una relación secreta y complementaria, aumenta su erotismo, su diversidad sexual, la sensación de libertad, autonomía de la pareja, el deseo carnal por la otra persona, la sensación de tentar y jugar con lo prohibido, la discrecionalidad de romper las reglas de la confianza y todo ello se vive en la clandestinidad. La persona con la cual se comete el acto sexual, es su cómplice. Sin embargo, sí se está del otro lado, se vive como una gran traición que rompe con el sentido de exclusividad sexual y la necesidad de pertenencia en pareja.
• Alquimia sexual: No está relacionado con el contacto sexual, sino con sentirse especial, sentirse vivo, importante, atractiv@, visible para la otra persona, desead@ y conectado con alguien más.
• Involucramiento emocional: Es la posibilidad de ser emocionalmente importante para alguien, no solo por el atractivo físico, sino por la posibilidad de pasar de la atracción, al enamoramiento y al sentimiento del amor y a involucrarse con una actitud positiva de amar a la otra persona.

No se considera que son amigovios, los encuentros ocasionales de una sola vez.

¿Quiénes lo practican más?

Aunque no es exclusivo de un grupo etario, algunas investigaciones lo asocian más a personas jóvenes, adultos emergentes y adultos maduros, como lo señala la pedagoga alemana Elisabeth Vanderheiden (Vanderheiden, 2021). Y, para algunas personas son parte de las prácticas de las culturas juveniles.

¿Podemos pasar de la amistad al amor romántico?

En una relación de amistad, cuando empezamos a conocer a una persona, empezamos a compartir códigos genéricos de comunicación como el clima o el tráfico.

Las amistades superficiales se forman y se mantienen porque son gratificantes y se basan en el principio de intercambio. En contraste, las amistades desarrolladas se basan no solo en las recompensas, sino también en el interés mutuo de los amigos y en el bienestar del otro (Franzoi, 2007, p. 451).

Cuando conocemos a un amigo potencial, podemos compartir códigos íntimos, se conocen como códigos de autorrevelación. Y, la cantidad de información íntima que podemos compartir, da cuenta de lo bien que nos sentimos con esa persona.

Desde el punto de vista de la Psicología Social, la teoría de la penetración social de Irving Altman y Dalmas Taylor (Franzoi, 2007, p.451). Mencionan que el desarrollo de una relación está asociado con el cambio gradual de la comunicación de una discusión de temas superficiales a intercambios más íntimos.

La teoría describe el desarrollo de relaciones de lo superficial a lo profundo cuando se van compartiendo entre los amigos códigos de autorrevelación cada vez más íntimos. Ello da cuenta que podemos pasar de lo superficial a la compenetración de deseos que van más allá de la amistad, hasta llegar a las relaciones sexuales.

Sin embargo, sí los amigos pasan al nivel del sexo o incluso al amor romántico, se corre el riesgo de perder la amistad y la conexión social. Y, no solo eso, si las cosas salen mal, después del rompimiento, los ex amigos quedan vulnerables en la interacción social, a ser exhibidos por en lo individual y en lo social, como cualquier otra relación de pareja que termina mal.

¿Qué son las relaciones de amigovios?

Son las relaciones sexuales entre dos personas que mantienen lazos de amistad. pero no hay un compromiso de amor romántico inicial. Sin embargo, si hay un compromiso en mantener en una relación casual, secreta en donde se pone a prueba el placer de las relaciones sexuales y el riesgo de perder la amistad, si las cosas salen mal.

¿Cuáles son las consecuencias de experimentar una relación de amigovios o amigos con derechos?

Sí una relación como esta termina, existen varios escenarios que pueden presentarse en lo bueno y en lo malo.

Lo malo

• Si era más, cualitativamente hablando, el eje de las relaciones sexuales, entonces se puede decir que era más sexo que amistad. Propiciando la separación de los amigos y en algunos casos, sin conexión sexual y social posterior al rompimiento.

Lo bueno

• Si era más, cualitativamente hablando, el eje de la amistad sobre las relaciones sexuales, en general la relación de amigovios continúa, se pueden fortalecer los de amistad y lo sexual queda en segundo plano.
• Sin embargo, también, pude terminar la relación de amigovios, y dar paso a una relación de amor romántico

A manera de reflexión final

• Las relaciones de amigovios, amigos con beneficios o amigos de roce, son una alternativa más de vivir la sexualidad y las relaciones sexuales en la modernidad líquida.
• Tienen aspectos positivos y negativos.
• Pueden atrapar como cualquier relación de pareja.
• Cuando una de los amigos tiene una relación formal, se trata de una relación de infidelidad, la cual si se descubre traerá consecuencias.
• Es más común de lo que imaginamos.
• Y, en la paradoja, muestra un afecto entre los amigos que puede terminar en compartir afecto, libido y el fortalecimiento de los vínculos de apego, convirtiéndose en una relación romántica. Sin embargo, también puede terminar con los vínculos de sociales, la conexión social y en un duelo conflictivo, afectando no solo a los ex amigos implicados, sino también a las parejas oficiales, cuando estas existen.