Los celos: es más fácil sentirlos que entenderlos
Los celos son una emoción compleja y a menudo malinterpretada, que puede afectar negativamente las relaciones interpersonales.
Algunos tópicos sobre los celos
- ¡Si no tiene celos, es porque no te quiere!
- ¡Necesitas borrar a todas las mujeres de tus redes sociales, no me siento segura contigo!
- ¡Me saludas a tu novia en turno y me traes una rebanada de pastel de bodas!
- ¡Yo, si puedo tener amigos y amigas, pero tú no, porque no eres una persona confiable!
- ¡Incluso si hablaba con mis familiares se ponía celoso!
- ¡El problema eres tú, yo no necesito ningún terapeuta para que lo sobornes y me diga que yo soy la celosa!
- ¡Yo no era celoso, pero ella me hizo ser así!
- ¡En el supermercado, no puedo ir a ningún sitio, porque se molesta y me dice que estoy viendo a otras personas!
- ¡Vivir con una persona celosa es un verdadero infierno!
- ¡Estaré más tranquilo, el día que admita que me engaña cada vez que sale de la casa!
- ¡Al principio me defendía de sus acusaciones, pero era contraproducente! Nunca comprobó nada, pero sus quejas tienen más de 30 años.
Experimentar celos es una de las experiencias que más incertidumbre crean en las personas. Como seres humanos, todos tenemos la necesidad de amar y de ser amados. Sin embargo, ¿Qué sucede cuando depositamos nuestra confianza y nuestras expectativas afectivas en alguien más y suponemos que esa persona nos está traicionando?, ¿Los celos son una forma de amor?, ¿Son imaginación desbordada, falta de empatía, frustración, narcisismo, celos delirantes, conducta psicótica, baja autoestima, carencia de remordimiento después de realizar actos negativos contra la persona celada? ¿Una persona que vivió en un ambiente funcional puede llegar a experimentar celos enfermizos? ¿Una persona que vivió en un hogar donde los celos eran comunes, tenderá a repetir ese patrón? ¿Existen los celos normales y los celos patológicos?
Son más, las peguntas que en ocasiones las respuestas que tenemos, hasta el momento. Sin embargo, es un hecho contundente en los testimonios anteriores: “todas las personas han experimentado alguna forma de celos, ya sea del lado del celoso o de la persona celada”.
La ciencia detrás de los celos
Generalmente cuando hablamos de ciencia, viene a nuestra cabeza el método científico, para unos. Otras personas pensarán en resonancias magnéticas para explorar el cerebro del celoso, otros más dirán: lo dijo un experto que entrevistaron en la televisión. Y todos ellos se podrían tomar entonces como una verdad absoluta, como algo incuestionable, sobre todo si lo dicho por los expertos, está basado en teorías, investigaciones, encuestas, técnicas sofisticadas para recabar datos. Sin embargo, todas ellas tendrán algunas diferencias entre sí, pero serán expresadas como verdades casi absolutas.
En la construcción del conocimiento, en general se parte de algo que los expertos llaman, el objeto de estudio, en este caso los celos. Para poder explicar dicha conducta se hace uno de una estrategia relativamente simple. Se define, lo que se entiende como celos y entonces se observa, se describe, se explica y se predice ¿por qué alguien es celoso o podría serlo?
También se habla de enfoques: cuantitativo (se observa y se cuenta la conducta), cualitativo (se observa y se clasifica la conducta), hermenéutico (se realiza una interpretación de la realidad de la conducta observada) o una manera de entender la realidad utilizando el pensamiento complejo (se parte entre muchas variaciones que la conducta es un todo organizado, que se sigue transformando constantemente). Para el biólogo, filósofo y escritor chileno Humberto Maturana, “la ciencia moderna es un dominio peculiar de explicaciones y afirmaciones derivadas acerca de la praxis del vivir que es definida y constituida por el observador” (Maturana, 1997, pág. 30).
Se dice que la ciencia es objetiva en el esquema positivista. Sin embargo, experimentar celos dentro de lo objetivo de estos enfoques es complicado, ya que cada persona los vive de forma subjetiva y única, pero con algunas coincidencias en su cuerpo, mente y contexto. Es la unidualidad del esquema mente-cuerpo en el concepto de salud-enfermedad.
Las diferentes definiciones conceptuales de los celos
El que de la ira se deja vencer, se expone a perder. Proverbio
Celos: sospecha, inquietud y recelo de la persona amada haya mudado o mude su cariño poniéndolo en otro (Punset, Bisquerra & Laymuns, 2018, pág. 59).
Celos: Sentimiento que experimenta una persona cuando teme o sospecha que la otra persona amada quiere o desea a otra, o cuando siente que otra persona prefiere a una tercera en lugar de a ella: tener celos de alguien. Sentimiento de envidia que provoca el deseo de tener o disfrutar de algo que tienen o disfrutan los demás (Larousse, 2003, pág. 220).
Celos: Emoción negativa en que el individuo siente que una tercera parte parece despojarlo (o es probable que lo despoje) del afecto de un ser querido. Los celos implican una relación social entre tres individuos: el celoso, la pareja deseada por el individuo celoso o con quien mantiene una relación, y el rival que representa una amenaza anticipada para esa relación. Las relaciones románticas son la fuente prototípica de los celos, pero cualquier relación significativa (con los padres, amigos, etcétera) es capaz de producirlos. Se distinguen de la envidia por el hecho de que siempre involucran a tres personas (APA, 2010, pág. 73).
Celos: Sentimiento de celotipia. Estado emotivo ambivalente con manifestaciones de odio y de agresión, algunas veces violentas, contra una persona amada porque demuestran afecto por otra, a la que es extendido el sentimiento de odio. C. patológica, cuando en la realidad falta el rival y se basa en fantasías (Merani, 1979, pág. 27).
En la riqueza del lenguaje, unas palabras sirven para definir y describir otras. Los celos formarían parte del universo de emociones descritos por Eduardo Punset y estarían integrados por agrupaciones de conceptos llamados galaxias o familias de emociones y en su parte estructural estarían al menos tres de ellas: la familia de la ira y la ansiedad presentes y la familia del amor, esta última como una galaxia a punto de estar ausente.
Es normal dentro del pensamiento cotidiano, reducir las cosas y simplificarlas, para no hablar de una gran complejidad. Prueba de ello es agrupar bajo la palabra celos, diferentes explicaciones de los mismos, a esto se le llama polisemia, es decir, entender un concepto con muchos más conceptos, como si fueran sinónimos. En general se trata de emociones, sentimientos o conductas que se sienten ante la posible pérdida de las atenciones, los afectos o el amor del ser amado, pero existen otras posibilidades más.
Es normal dentro del pensamiento cotidiano, reducir las cosas y simplificarlas, para no hablar de una gran complejidad. Prueba de ello es agrupar bajo la palabra celos, diferentes explicaciones de los mismos, a esto se le llama polisemia, es decir, entender un concepto con muchos más conceptos, como si fueran sinónimos. En general se trata de emociones, sentimientos o conductas que se sienten ante la posible pérdida de las atenciones, los afectos o el amor del ser amado, pero existen otras posibilidades más.
Otros enfoques para entender los celos
Los celosos certificados, lo estarán del pasado, el presente y el futuro de la pareja. Psic Juan Antonio Barrera
En la complejidad para analizar los celos, también voy a considerar otros elementos que intervienen de manera directa o indirecta:
- Límites entre lo normal y lo patológico (ocupan un lugar simbólico entre el amor y el desamor). Si bien es un asunto complejo hablar de lo normal y lo anormal, algunos autores toman como referencia, los siguientes criterios:
- Perturbación: que es la experiencia de dolor físico o emocional, es común en la vida. Algunas veces el nivel de dolor es tan grande que al individuo le cuesta mucho trabajo funcionar. Algunas personas no pueden sobrellevar las tareas de la vida diaria.
- Deterioro: En muchas circunstancias la perturbación intensa conduce a una reducción de la habilidad de la persona para funcionar. El deterioro implica una reducción de la habilidad de la persona para funcionar a un nivel óptimo o incluso a un nivel promedio. Algunas personas para ocultar su nivel de perturbación y deterioro, presumen de lo bien que se sienten.
- Riesgo para los demás y para sí mismo: Algunas veces las personas generan un riesgo para sí mismas o para los demás. En este contexto, riesgo se refiere a un peligro o a una amenaza al bienestar de una persona. Los pensamientos o conductas de un individuo pueden amenazar el bienestar físico o mental propio (suicido) o de otras personas (homicidio).
- Conducta social y culturalmente inaceptable: El último criterio se define como la conducta que está fuera de las normas del contexto social y cultural donde sucede. Son la gente que se desvía de las normas esperadas (Halgin & Krauss, 2004, págs. 5-6).
- Son relaciones de apego disfuncional.
- En general se conocen como relaciones tóxicas o dependientes.
- Son incertidumbre sobre la realidad de la relación (son imaginación o fantasía).
- El celoso siempre trata de disminuir la incertidumbre y atenuar el riesgo de perder a la persona amada y, sin darse cuenta, en ese intento se dirige hacia la destrucción del amor (Díaz & Manrique, 2012, pág. 10). Hiper vigilar, ser intrusivo, y sobreprotector con la pareja, y no dejarle movilidad social, independencia y autonomía, termina sofocando la relación.
- Etiología (sociedad patriarcal).
- Sociedad cuya cultura pone en manos del cabeza de familia varón o grupo de parentesco, según los casos una notable autoridad y poder sobre los demás (Pratt, 2018, pág. 281). Los celos del hombre hacia la mujer son socialmente aceptados en este tipo de sociedades.
- Son psicosociobiología (instinto, compulsión a la repetición, son impronta familiar, competitividad extrema).
- Eduardo Punset en entrevista al neurocientífico Ralph Adolphs sobre los celos. “Creo que deberíamos considerar los celos como una de las emociones que llamamos sociales o auto conscientes” … “Por otro lado se dice que el hombre por su parte busca invertir bien en sus genes y esto lo convierte en celoso. El macho en los animales y en los hombres, vigila a la hembra e intenta mantener a los demás machos alejados porque no quiere perder su inversión y quiere tener una buena descendencia. De hecho, los celos forman parte de la relación amorosa y del mantenimiento de la pareja, son un sentimiento de defensa contra las alertas de infidelidades y abandono (Alemar, 2014).
- El córtex prefrontal (relacionada con el autocontrol y la toma de decisiones) regula la actividad de la amígdala (centro de las emociones). Sin embargo, en un ataque de celos, la corteza prefrontal pierde la batalla y es por ello que se realizan en general muchas acciones impulsivas que en general causan más destrozos que reparaciones en la pareja.
- La compulsión a la repetición son las conductas que generacionalmente tienen a repetirse sin estar conscientes los descendientes de ello. Esto es, si los abuelos fueron celosos, los padres lo son y los nietos también inconscientemente repetirán esa conducta.
- La impronta familiar, es el sello sensorial asociado a las conductas familiares que los padres enseñan a los hijos. Si los padres han sido celosos a los hijos se les hará natural serlo y repetir así la conducta de los padres.
- Son emoción (cuyos componentes son fisiológicos, cognitivos -sentimiento de celos- y conductuales), son intensidad; leve, moderado o agudo, son temporalidad; cortos largos y crónicos y obedecen al pasado, al presente y al futuro.
- Todos experimentamos emociones continuamente, pero no siempre sabemos reconocerlas o definirlas. Una emoción es una respuesta más compleja de lo que podemos suponer ya que de hecho incluye varios aspectos simultáneamente: neurofisiológico, comportamental y cognitivo. La respuesta neurofisiológica se refiere a las respuestas corporales internas (taquicardias, sudoración, temblor en las piernas, secreciones hormonales, neurotransmisores, etc.). La respuesta cognitiva es lo que experimentamos, principalmente con la cara (sonrisa, llanto, cara de enfado). La parte cognitiva se refiere a que podemos tomar conciencia de las emociones que experimentamos y ponerles nombre. En la medida que somos capaces de dar nombre a las emociones de forma correcta, estamos en mejores condiciones de saber lo que nos pasa y regular mejor nuestras emociones. Los estímulos que activan nuestras emociones pueden ser internos o externos. Los pensamientos, recuerdos, fantasías, y más, pueden provocar emociones. Las emociones son resultado de una valoración de los estímulos y acontecimientos que nos rodean. Mediante un mecanismo innato y automático valoramos los acontecimientos percibidos en función de nuestras creencias, intereses y objetivos. Una emoción se produce en fracciones de segundo. Y pueden durar minutos, horas o incluso días. Los sentimientos son las emociones hechas conscientemente (Punset, Bisquerra & Laymuns, 2018, págs. 15-17).
- Son polisemia dentro del lenguaje (en el universo de emociones son parte de la ira y tristeza). Yo los llamo: sistemas complejos de pensamiento. Son palabras que tienen varios significados.
- Son psicología pura: la sombra personal junguiana (culpa, traición, envidia, violencia, inseguridad, miedo, duda, caducidad del amor y más), el Edipo Freudiano, son idealización.
- Un ejemplo de cómo podemos observar la sombra se da en: Los sentimientos exagerados que tenemos hacia los demás, las acciones impulsivas o inadvertidas, en los momentos que nos sentimos humillados y en los enfados desproporcionados que experimentamos.
- Son enfermedad (trastorno narcisista, trastorno delirante, obsesión, delirio, acoso, persecución, violencia extrema, asesinato).
- En el trastorno delirante, existen diferentes tipos; se destaca el celotípico, se caracteriza por el delirio de que la pareja sexual es infiel. Por ejemplo, un hombre puede estar erróneamente convencido de que su esposa tiene un romance, y puede construir un conjunto de “evidencias” de eventos domésticos rutinarios (como un cobro inexplicable en el recibo del teléfono) para “probar” la infidelidad (Halgin & Krauss, 2004, pág. 366).
- Obsesión, pensamiento, idea, imagen o impulso persistente que se experimenta como algo molesto e inapropiado y que genera una marcada ansiedad, angustia o incomodidad (APA, 2010, pág. 350).
- Trastorno narcisista de la personalidad, alteración de la personalidad caracterizada por un sentido de autoimportancia poco realista y excesivo y por la falta de sensibilidad ante las necesidades de las demás personas (Halgin & Krauss, 2004, pág. 603).
- Delirio, desorden de las facultades intelectuales caracterizado por una serie de ideas erróneas, que chocan con la evidencia, inalcanzables por la crítica. El delirio se acompaña a veces, con trastornos de la conciencia (Merani, 1979, pág. 27).
- Son interacción y relación social disfuncional mediadas por la neurociencia social.
- La neurociencia social estudia como el ambiente influye en el cerebro y el cerebro en el ambiente. “Estudia la relación entre los procesos neurológicos del cerebro y los procesos sociales” (Franzoi, 2007, pág. 21).
- Son violencia: cosificación del celado. Degradar a un ser humano viéndolo o tratándolo como cosa.
- Son idealización y ceguera del futuro.
- Idealización: la exageración de los atributos positivos y la minimización de las imperfecciones o fallas asociadas con una persona, cosa o situación, de modo que se ve como perfecta o casi perfecta (APA, 2010, pág. 255).
- Ceguera del futuro: vivir con una persona celosa, es un infierno. El celoso cree que su pareja va a cambiar y vivirán felices sin la interacción social con otras personas más. Y, la persona celada creerá que el celoso va a cambiar. Ambos saben inconscientemente que ninguno de esos escenarios sucederá, pero deciden permanecer en la relación. “La miopía del futuro se da en la toma de decisiones, se privilegia la recompensa inmediata (estar con la pareja), aunque esto tenga repercusiones negativas a mediano o largo plazo” (Manes & Niro, 2014, págs. 238-239)
- Son razonamiento motivado por parte de ambos miembros de la diada.
- El razonamiento motivado. Es pensar que tienes la razón, aun cuando sabes que estás equivocado. A través de un sesgo cognitivo, interpretas la realidad, “seleccionamos los datos coincidentes con lo que queremos creer y reforzamos así, nuestros preconceptos en un movimiento de retroalimentación y, como gesto contrario, los evitamos, los ignoramos, les quitamos valor o simplemente olvidamos, lo que les contradice“ (FM Aveyron, 2018). El celoso va a comprobar a todas luces que tiene razón y que el celado es una persona infiel o que pretende abandonarle.
- Son falta de inteligencia emocional en la resolución de conflictos.
- «Peter Salovey y John Mayer (1990) acuñaron el término inteligencia emocional. El cual se refiere a cuatro competencias relacionadas: las habilidades para percibir, usar, entender o regular, las emociones las propias y las ajenas, de modo que nos permitan alcanzar metas» (Salovey & Mayer, citado en Sandoval 2018). Esta estrategia de cuatro puntos se puede utilizar en la resolución de conflictos en los celos.
- Son ceguera del amor e ilusión de una relación permanente e inmutable.
- En la ceguera del amor, las personas llegan a suponer que la relación inicial de pareja, nunca cambiará y todo permanecerá tan lindo como el primer día y que en la ilusión vivirán felices para siempre.
Son todos los elementos anteriores y muchos más.
En conclusión
Los celos son singularidad dentro del pensamiento complejo (los sistemas o conceptos imbricados, son una totalidad -es un evento holístico- y es un evento sistémico, pertenecen al mismo ensamblaje). Cada persona los vive como una realidad única.
Existen muchos esfuerzos por entenderlos y dentro de la realidad de cada investigador suponen una parte de verdad al analizarlos. Y todos tienen una parte de razón. Sin embargo, no existe una propuesta universal única de análisis.
Por lo tanto, es más fácil experimentarlos que estudiarlos. Y en su análisis, se deberían tomar en cuenta muchos más aspectos y no solo centrarlos en un par de emociones asociadas a la pérdida del amor de una pareja. A pesar de ello un acierto indiscutible es que todas nuestras conductas están aparejadas a alguna emoción o a una compleja mezcla de ellas. Sin emoción, no hay planificación, ni razonamientos, ni toma de decisiones, ni pasiones en la vida. El análisis de los celos sigue en proceso de construcción