Síndrome de Rebeca: ¿De qué se trata?

Descubre el síndrome de Rebeca, una alteración que causa celos anormales por las antiguas relaciones de la pareja actual.

síndrome de Rebeca. Esta alteración causa en el paciente sentimientos de celos anormales por las antiguas relaciones de su compañero sentimental. Si no se aborda a tiempo, puede terminar causando fracturas irreparables en la relación y la autoestima de quien lo sufre.

¿Qué es el síndrome de Rebeca?

La autora que dio nombre a esta afección fue Carmen Posadas, quien escribió un libro titulado Síndrome de Rebeca: Guía para conjurar fantasmas amorosos. La escritora se inspiró en la película del director Alfred Hitchcock que se basa en la novela homónima de Daphne Du Marier. Dicha obra cuenta la historia del Sr. Winter, cuya esposa muere y con el tiempo, se casa por segunda vez. Su nueva esposa será atormentada por el fantasma de su antigua mujer y los recuerdos de ella.

Siguiendo esta línea, se trata de una afección, donde la persona experimenta celos por las antiguas relaciones de su pareja actual. Quienes lo padecen, sienten gran malestar al pensar en estos romances que ocurrieron antes de que la relación iniciara.

No obstante, la autora aclara que el término también describe otras situaciones poco saludables en la relación de pareja. Por ejemplo, se puede decir que alguien padece el síndrome si en sus romances siempre busca a alguien muy similar a su ex. Lo mismo aplica cuando de forma consciente, intenta encontrar a una persona que sea el opuesto de su antigua pareja.

En todas las situaciones que se describieron, los romances anteriores se comportan como fantasmas que nublan la visión del presente. Como resultado, los afectados por el síndrome de Rebeca desarrollan comportamientos conflictivos en sus relaciones.

Síntomas

Como se mencionó antes, la afección se puede manifestar de diferentes formas y eso puede causar variaciones en los síntomas. En el caso más común, la persona experimenta celos irracionales por la ex pareja del otro que pueden derivar en conflictos. Por ejemplo, podría espiar sus redes sociales y mensajes para asegurarse de que no mantengan contacto. O, si mantienen una amistad, quizá intente deshacer el vínculo a toda costa.

Si sucede que la persona busca parejas parecidas a su ex, es posible que se frustre de forma constante. Después de todo, no es posible conocer a alguien que sea idéntico a otro a nivel físico, ni tampoco en la personalidad. Por ende, compararía a sus nuevas parejas con su ex y se sentiría insatisfecho.

En el último escenario, donde el síndrome de Rebeca lleva a la persona a buscar opuestos, la situación es distinta. Esta persona podría rechazar a posibles parejas, por el simple hecho de que tienen alguna actitud o comportamiento que les recuerde a su ex. Aun cuando se trate de alguien distinto que no tiene ningún parecido objetivo.

Causas

No existe una causa específica que pueda explicar esta alteración, como sucede con la mayoría de las afecciones mentales. Todo apunta a que se trata de diversas situaciones que convergen en la persona y dan lugar al síndrome.

Uno de los principales factores es la autoestima, ya que de allí se desprende el grado de confianza que alguien posee. A menudo, quienes viven con este problema, se comparan con los ex de su pareja y piensan que nunca podrán superarlos. Esta comparación revela inseguridades y miedo a no ser suficiente para el otro.

Por otra parte, las experiencias del pasado pueden jugar un papel importante en el síndrome de Rebeca. Por ejemplo, si en su relación anterior su ex pareja le terminó porque deseaba retomar un antiguo romance, eso podría influir.

En cualquier caso, lo ideal es que la persona reciba la evaluación de un profesional de la salud mental. Solo así se podrá comprender de forma precisa las variables que interfieren en su situación y la mejor manera de hallar una solución.

¿El síndrome de Rebeca es una enfermedad real?

Si bien resulta bastante interesante el concepto, es importante aclarar que no es una patología reconocida por ninguna institución. En este mismo sentido, es necesario destacar que la autora del libro no es una especialista en salud mental. Su obra tiene la intención de ser una especie de ensayo acerca de los celos en la relación de pareja.

Entonces, a pesar de que los rasgos que conforman el síndrome sí existen, los expertos no lo ven como un cuadro clínico. Por lo general, se dice que estos comportamientos tienen que ver con problemas más profundos como baja autoestima, traumas e incluso psicosis.

Tratamiento

El tratamiento de esta alteración dependerá de los factores que entren en juego en cada caso. Si se trata de inseguridades que se relacionan con una baja autoestima, la psicoterapia se enfocará en ello. Aquí podrían ser útiles técnicas para elevar la autoestima y la confianza en sí mismo.

En cambio, si se trata de traumas del pasado, la intervención tendrá como objetivo reprocesar el evento traumático. Al mismo tiempo, se trabajarán las creencias irracionales en torno a las relaciones de pareja y el amor.

En la mayoría de los casos, la psicoterapia es suficiente para tratar los síntomas de la alteración. Aunque, puede ocurrir que los celos provoquen sentimientos de ansiedad o estrés intenso. Si eso ocurre, podría ser necesario referir con un psiquiatra que pueda recetar medicinas para regular el estado de ánimo.

Para finalizar, si sospechas que tú o alguien que conoces tiene el síndrome de Rebeca, lo mejor es buscar ayuda. Este tipo de problemas tienden a ser crónicos cuando no se recibe la atención necesaria y pueden conllevar a otras situaciones más graves.